TEATRO:
Fuente. Lic. Patrizia Aymerich
Criaturas de Orange
Fotos. Cortesía
“Estamos inquietos por la necesidad de decir cosas”
Julián Izquierdo Ayala abrirá el II Festival de Jóvenes Directores del Trasnocho con “Como agua para chocolate”
La obra se estrena el 15 de enero y se presentará únicamente por 2 semanas
El clásico celebra sus 25 años de existencia
El joven director Julián Izquierdo Ayala se arriesga con una exquisita y conmovedora puesta en escena del clásico de Laura Esquivel Como agua para chocolate, que abrirá la segunda edición del Festival de Jóvenes Directores el 15 de enero.
Se trata de una versión libre de Izquierdo Ayala, basada en el libro y guión cinematográfico de la autora mexicana. Los sabores, la sensibilidad humana y la tragedia de la represión se entremezclan para dar vida a una historia sobre la libertad y el amor en tiempos de crisis, con una propuesta hiperrealista y única.
¿Qué es para ti la dirección teatral?
JIA: La dirección para mí no es más que crear. Materializar una idea, un mensaje… con una serie de elementos que deben ser cuidados para construir una gran fórmula, que termina exhibiéndose en un escenario.
¿Habías dirigido alguna obra antes de Como agua para chocolate?
JIA: Sí. Actualmente trabajo como director general en mi propio grupo Teatral, el Grupo Fábula, en el llevo ya seis años. Allí trabajo como instructor y director de montajes, así como en la dirección de talleres-montajes estudiantiles y juveniles. Como agua para chocolate es mi primera dirección fuera del Grupo Fábula.
¿De qué se trata la propuesta de Como agua para chocolate?
JIA: La propuesta de la obra se va por una vertiente hiperrealista y ligera. Tomé lo clásico y mágico de esta historia, para tratar con el mayor cuidado hacerle justicia a la obra de Esquivel. La acción es un requisito para que los personajes se comuniquen dentro de este lugar tan particular que ayuda a la protagonista a expresarse: la cocina.
¿Cuál es el riesgo que asumes en esta producción como nuevo director?
JIA: Esta producción supone un montón de riesgos y desafíos. Compone una propuesta escenográfica ambiciosa, un despliegue amplio de utilería y una propuesta de puesta llena de detalles. Un gran todo que es conformado por partes muy pequeñas que se tienen que engranar para fluir con armonía dentro de la escena. También es siempre un desafío trabajar con actores con los que no había trabajado antes, como director, y que siempre tienen algo innovador para aportar.
Además, creo que el riesgo que asumimos todos en este festival es, por supuesto, no lograr que el montaje satisfaga a un público ávido por ser parte de estas nuevas propuestas. Pero creo que cuento con un equipo de actores y creativos que me acompañan de la mano en este proceso de creación y estoy seguro que lograremos un buen resultado.
¿Cuáles son tus expectativas en el Festival?
JIA: Aprender. Afortunadamente, este trabajo es un oficio que nunca acaba porque uno debe estar aprendiendo todo el tiempo. Para mí ha sido un proceso muy enriquecedor. Cuando llegue el momento de ver las otras propuestas estoy seguro de que inyectará aún más al proceso. Mi expectativa es cumplir con mi trabajo y enriquecerme con los talentos que, como yo, estamos inquietos por la necesidad de decir cosas.
Además del Festival, ¿qué otras metas te propones para 2016?
JIA: Sin duda, seguir trabajando. Seguir formando a mis chamos del Grupo Fábula, seguir construyendo mi carrera como actor y director, y por supuesto seguir creando. Mi mayor meta definitivamente es de creación.
¿Crees que este es un buen momento para desarrollar producciones en el país?
JIA: Todo momento es un buen momento para crear y desarrollar en el país. Incluso, creo que mientras más difícil estén las cosas, mayor será la necesidad de seguir creando y desarrollando.
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