Por. Claudio Emilio Pompilio Quevedo @cepq @SUROESTEonline
Photos. Courtesy CEPQ y Manbo
Como ya les conté en la primera parte de este reportaje especial, Manbo Taberna, es un lugar inédito en el Aljarafe.
Restaurante, escuela, experimento, experiencias, innovación, sabores únicos e inesperados, forman parte de su esencia, pero sobre todo, son sus chicos, lo que dan vida al lugar, y eso se siente y aprecia.
Por ello, en esta parte final, quiero presentaros el testimonio de dos compatriotas. Dos venezolanas, que a pesar del temor que produce lo desconocido, vencieron sus propios fantasmas, dejando todo atrás, para cambiar sus vidas, trabajar por sus sueños y labrar un mejor porvenir.
REBECA HIDALGO. (Cocina)
"Para adelante, porque el futuro está adelante".
* Soy venezolana. Salí de Venezuela hace tres años, cuando mi esposo murió de COVID.
Mi madre, mis tres hijos y yo viajamos a Bielorrusia, donde comencé mi carrera en la cocina, trabajando en restaurantes, y cuando estalló la guerra, decidimos salir de allá, y venir a España.
- ¿Como descubriste y llegaste a Manbo?
* Mientras estaba esperando el proceso de los documentos, tanto los de Bielorusia, como los venezolanos, tenía que formarme. Manbo es una escuela de hostelería, así que, por eso llegue aquí, donde estoy ahora, aprendiendo cada día más.
- ¿Existe algo que te guste más de Manbo?
* Me ha encantado todo, porque hay una forma diferente de preparar las cosas. Los sabores nuevos. El señor Vicente, que sabe de todo, por ejemplo, cuando me ha pedido poner vinagre de Jerez a una sopa, ¡que yo no había usado en mi vida!, y descubro que le da un toque diferente. Voy descubriendo sabores, teniendo nuevas experiencias, y eso me encanta.
* No, porque yo comencé como ayudante de cocina. Ahora estoy como Jefa de cocina. Cuando termine allí me tocarán las otras áreas.
Siempre me ha gustado cocinar, la comida de Venezuela me encanta porque es muy rica, con mucha sazón, y veo que la diferencia con la de aquí radica en que, la española, es como más pensada, más elaborada, tiene más proceso, tiene un inicio y un final. La venezolana es mucho más simple de hacer.
Aquí experimentamos, hemos logrado una fusión con las empanadas (empanadillas venezolanas) y los tequeños venezolanos. Al público les encanta, sobre todo las empanadas , porque no están acostumbrados al cilantro, que es tan nuestro, básico en la cocina de Venezuela, y se sorprenden gratamente cuando lo prueban.
- A manera personal, de las comidas españolas que has probado, cuál te gusta, y, cuál no has degustado, y quisieras comer?
- ¡Me encanta el choco! que yo conozco como un calamar grande, pero me encanta como lo cocinan, la cantidad de platos que hacen con el, aparte que el sabor me encanta.
Me encantaría probar... el bacalao bien hecho, en una salsa verde. Lo he intentado hacer, pero todavía estoy aprendiendo.
- Y de las personas que vienen a Manbo, que me dices?
* En general todas las personas de aquí, de Sevilla, son muy especiales, son muy abiertos con el tipo de comida, con el personal. Estoy muy agradecida.
En el futuro no me veo con un negocio de comida, pero si me gustaría seguir en la cocina. Me gusta, me distrae.
- Para tantos jóvenes latinoamericanos que sueñan con venir a Europa, pero, no se atreven, ¿que les dirías?
* Que vengan sin miedo. Hacerlo ha sido positivo para mi, para mis hijos.
Vale la pena agarrar las maletas y salir sin temor, porque para eso está la vida. Yo les digo, para adelante, porque el futuro está adelante. Para atrás, nada, que aqui todo vale la pena.
LILIBETH DEL VALLE BETANCOURT DE MORILLO. (Barra)
"Duré seis años indecisa, por el miedo de perder todo…"
Llegamos a Sevilla hace nueves meses y nos gusta, porque es una provincia muy cálida, parecida a Venezuela. Aquí mi esposo tiene a su hermana, que fue quién nos recibió. En Venezuela quedaron mis seres más queridos. Mis padres y dos hermanos. Pero no me planteo regresar, ya que aquí tenemos calidad de vida, buena alimentación, seguridad personal, podemos hacer compras... Nos hemos adaptado muy bien porque la gente nos da un trato muy bonito, les gusta como hablamos, y eso lo he notado aquí en la barra.
- ¿Cómo llegaste a Manbo?
* Yo trabajaba en un restaurante de comida venezolana y mexicana en Mairena, pero cerro. Hice mi CV y comencé a llevarlo a varias partes, pero Manbo me encantaba, quería estar aquí. Me enfoque en este lugar, y cuando los contacté me dijeron que mandara mi CV por WhatsApp, pero no. Yo preferí traerlo personalmente, encontré al Sr. Vicente, hablé con él y, a los 4 o 5 días me llamaron para avisar que estaba aceptada. En Manbo tengo dos meses y medio aproximadamente. Inicie en cocina y luego me pasaron a la barra. El sistema rotativo me gusta, pero estoy más en barra. El sr. Vicente ahora también me está enviado a la sala, porque debo aprender todas las áreas del negocio, atender al público. Pero lo que me encanta es la barra, allí soy muy rápida.
- De las comidas que se preparan acá, que tú no conocías, ¿cuál te gusta más?
* La ensaladilla de gambas, ¡me encanta!. El lomo argentino, que en Venezuela nunca lo había probado. Y las albóndigas de gambas, que son muy ricas.
- La receptividad del publico con ustedes ¿cómo ha sido?.
* Buenísima! Nadie nos ha puesto mala cara. Se van encantados con la comida, la atención, con todo.
- ¿Tú piensas que ha sido positivo para ti estar aquí. Estás satisfecha con todo lo que has aprendido?
* Si, me encanta, y a futuro me gustaría tener un lugar propio. Un negocito. Un restaurante pequeño para vender comida venezolana. La hostelería me gusta mucho porque mi mamá era cocinera en Venezuela, y mis hermanos tienen sus negocios de empanadas.
Aquí las empanadillas gustan mucho, pero las llaman "arepas", tal vez porque, como son hechas con harina de maíz, las llaman así, y para mi es curioso que se las comen con cubiertos. ¡Tú sabes!, nosotros los venezolanos las comemos agarrándolas con la mano, usando una servilleta.
Yo estoy enamorada de España y todos los días le doy gracias a Dios por darme estos momentos tan bonitos que vivo aquí.
- Una pregunta que he hecho a todos ustedes y pienso es imposible no hacer, ¿qué dirías a aquellos venezolanos que les da miedo dejar su país?
* Yo pase por eso. Duré seis años indecisa, por el miedo de perder todo, pero llego un momento que no aguantamos más y nos vinimos. ¡Pero valió la pena!.
Ahora yo le digo a quien sea, que si tiene la posibilidad de salir, ¡que salga!. Nosotros lo hicimos, y estamos felices aquí. Muy agradecida con el sr. Vicente, y pidiendo a Dios que le de mucha salud, porque él hace falta aquí.
Desde sus inicios, MANBO es sinónimo de calidad, y por ello, a pocos meses de abierto, fue galardonado en noviembre de 2022 por la prestiguiosa guía Restaurant Guru gracias a los favorables comentarios de sus clientes, galardón que ha recibido por segunda vez, el 1 de Febrero de 2023.
Como bien lo ha definido su creador y motor, don Vicente, MANBO es un feliz experimento que está logrando consolidarse como un excelente centro de formación hostelera.
Un lugar donde muchos jóvenes, especialmente venidos de muchas partes del mundo, tienen la oportunidad de formarse, obtener un certificado e integrarse al mercado laboral español, aparte de ser, definitivamente, un espacio muy especial, donde las personas que acuden a disfrutar su comida, tienen la oportunidad de conocer nuevos sabores, degustar platos exquisitos realizados con mimo, y mucho más, en medio de un entorno único en el Aljarafe.
Coordenadas.
Manbo Taberna. Calle Maimónides 102, local 11, 41930, Bormujos, Sevilla.
Tel. +34-644 30 24 50
E-mail: Manbo.Rest@gmail.com
Instagram: @TabernaManbo Facebook. @Manbotaberna
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