Por. SUROESTEonline_La Vie Charmant @cepq
La economía es un tema que interesa a todos y un aspecto de la vida moderna que influye nuestra existencia.
Por esto, y gracias al gentil intermedio de nuestra muy querida colaboradora la periodista Ana Teresa Delgado de Marín, tenemos el honor de poner a la disposición de nuestros lectores internacionales, el texto completo de Kasem Asker Hasan "Hacia un nuevo orden monetario - Bancario" que seguro encontrarán muy interesante.
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HACIA UN NUEVO ORDEN
MONETARIO – BANCARIO
Kasem Asker Hasan
Enero 2020
Introducción: Las crisis contemporáneas
La crisis financiera mundial de 2008 fue el epílogo de una larga cadena de crisis desde finales del Siglo XIX. Asuntos abordados y discutidos en Bretton Woods (1944) durante la creación del Fondo Monetario Internacional (FMI) como mecanismo de cooperación internacional, ante la necesidad de restringir las entregas de oro, permitidas solo para pagos del comercio internacional, al tiempo que, ante la constatación de que los bancos comerciales otorgaban créditos y contablemente registraban depósitos en compensación, mecanismo que llamamos Banca de Segunda Generación, donde los gobiernos colocan sus deudas como títulos negociables; aceptada esta opción como operación de menor riesgo y rendimiento asegurado, que compite, descaradamente, en el corto plazo, con la aventura de la inversión reproductiva, creadora de bienes y de empleos…en el largo plazo; con el resultado de generalizar la inversión financiera/especulativa; que alcanza a los tipos de cambios.
En tal contexto, el mínimo de las interacciones a las cuales debemos hacer referencia, para el estudio de las consecuencias económico-financieras en el ámbito político-económico mundial, en un momento dado, son: la perspectiva histórico-analítica o comprensión del pasado o diagnósticos y las prognosis correspondientes, al tomar en consideración las variaciones en los condicionantes.
De allí, que este artículo, a partir de las informaciones disponibles a la fecha, presente un breve diagnóstico; de la economía real para luego considerar los cambios sustantivos del acervo teórico, y, finalmente exponer una prognosis económica, acompañada de proposiciones de soluciones políticas.
1. Evolución reciente de la economía planetaria
Hay muchas razones por las cuales el final de la segunda década del siglo XXI encuentra a los analistas de la economía mundial preocupados por el próximo devenir. La primera de ellas son los desalentadores signos que muestra el comportamiento económico global, al comprobarse que las medidas tomadas para la recuperación del crecimiento, después de la crisis financiera de 2008 - 2011[1], no fueron todo lo eficaz que se esperaba; y, por lo contrario, el crecimiento inicial en las economías ribereñas del Atlántico Norte, fue seguido por el decrecimiento de la producción, del empleo, y del desvío de los recursos crediticios hacia actividades especulativas, estimulando la permanencia de la inflación; lo cual indujo al liderazgo político de los Estados Unidos (2017) a adoptar estrategias (América First) que se desvían del propósito de procurar la libertad de comercio y del movimiento de capitales antes propugnados; creando fuertes tensiones políticas; en particular con Rusia y China. Siendo la expresión sucinta de los cambios el que las Sociedades del Sur hayan contribuido más al bienestar económico del planeta, que las Sociedades de Norte; como se infiere de los hechos siguientes:
a) Un acentuado descenso del crecimiento del PIB mundial: 2.8% en 2014; y un crecimiento esperado de 2.1 para fines de 2109. Esto es una variación de -0.4% y,
b) La evaluación equivalente por continentes arroja los siguientes resultados: Norte América, -0.1%; Sur América, -0.5%; Asia, +0.2%; Australasia, -0.7%; África Sub Sahariana, y Europa Occidental, 0.0%, cada uno. África del Norte y Medio Oriente, -0.6%, y Europa del Este, -0.8%.
Debiendo decir que: en los Estados Unidos el alza de su tasa de interés, situada en torno al 3%, sobrepasa la tasa del crecimiento del PIB; siendo previsible su disminución para 2020, y que sus logros económicos se explican porque el financiamiento estadounidense, ocurre en su moneda nacional. Circunstancia que han defendido incansablemente, desde 1945, cuando el dólar se convierte en patrón monetario internacional…mientras que, en Sur América, es persistente la estanflación, ante el estrangulamiento crediticio por la vigencia de elevadas tasas de interés; dada la persistencia del doble déficit comercial-fiscal en todos los países; lo cual explica los descalabros de las monedas suramericanas[2].
En Asia, el liderazgo en el crecimiento económico lo lleva la India, al mermar el excedente comercial chino a lo largo del lapso 2012 – 2018; incrementándose el déficit fiscal y el alza de la tasa de interés, lo cual desalienta al sector productivo privado (56%); amenazado, además, por las autocráticas aspiraciones de Xi Jimping en disminuirlo.
En el caso europeo, Alemania mantiene un claro liderazgo económico, aunque la revaluación del euro podría llevar algunas nubes a su comercio exterior, focalizado fuera de la Unión Europea (73%); al tiempo que la tasa bancaria real negativa, abre campo a la especulación financiera. Esto y los crecientes déficits fiscales y de comercio exterior en la mayoría de los países de la Unión Europea, tienen déficits de balanza comercial sostenido o creciente que golpea a la economía europea…Con agravantes, sea cual sea el desenlace del Brexit, además de las tensiones en el seno de la Unión Europea, ante una Alemania que se opone férreamente al populismo asociado a la seguridad social.
Digamos, finalmente, que Rusia, aunque ha dejado flotar con amplitud al rublo, no logra diluir las amenazas depresivas…aumentadas por su ambición en aumentar su liderazgo en el ámbito internacional, lo cual lleva a déficits fiscales más altos.
De lo dicho, puede inferirse que detrás de la casuística de las crisis específicas en los distintos países[3] está presente una tendencia depresiva, que nos permite inferir que la causa última está en el mal funcionamiento del Sistema Monetario Financiero de Segunda Generación. Pareciendo indispensable introducir cambios para alcanzar una mejor funcionalidad económica-financiera. Mutación que llamaremos Banca/Finanzas de Tercera Generación; mediante la cual la población encontrará el empleo imprescindible para alcanzar con sus ingresos la subsistencia con riesgo mínimo.
Esto es, en términos políticos, el cumplimiento de la cláusula de empleo; explícita, o implícitamente, incorporada en las constituciones o contratos sociales contemporáneos.
En consecuencia, en el estudio de los sistemas monetarios se debe considerar las características del orden socio - político interno, u orden doméstico y los condicionantes de intercambio con otras sociedades, que se relacionan mediante el tráfico comercial – monetario – financiero – internacional, o condicionantes u orden externo; siguiendo las pautas evolutivas monetarias financieras descritas. (bolas de mata)
2. Cambios sustantivos del acervo teórico
Nadie duda de la afirmación que hace de la inversión productiva de hoy, la condición necesaria para ofrecer incrementos en la producción y en el empleo en el futuro… El problema es la amplitud del lapso de espera para satisfacer las necesidades, reales o imaginarias, que se vislumbran desde el presente…Siendo así, que los inversores potenciales, después de la experiencia de crisis económica - política mundial: 2008 – 2011; y, ante las esperanzas fallidas, deben ser cautelosos.
¿Puede ayudarnos el arsenal teórico de la Ciencia Económica y su capacidad de abstracción de los condicionantes azarosos del corto plazo coyuntural, al sumergirnos en el análisis situacional o clínico, condicionados por los cambios profundos relatados por la historia económica?
2.1 La Ciencia Económica: balance entre racionalidad y pragmatismo político.
La historia de la Ciencia Económica nos dice que, a partir de las decisiones políticas puestas en práctica y de la reacción de la colectividad, entre los aspectos más discutibles y discutidos están las sutilezas teóricas relativas a la presencia del dinero…Y que la teoría contemporánea sostiene que la información relevante, viene de brazos de los gastos realizados, de los ingresos percibidos y del necesario balance que iguala ingresos y gastos en los bolsillos de los agentes económicos, cuando actúan en los diferentes mercados, incluyendo el conformado por crédito bancario y su costo: la tasa de interés. Esto es la generalización de la actividad bancaria y de la evaluación del riesgo de deudores y acreedores.
En definitiva, es a partir de la información macroeconómica[4], en relación a las necesidades de crédito, que se puede determinar un componente central de la evolución de la actividad reproductiva, al considerar que si el gasto previsto es de inversión, se requerirá la máxima probabilidad de acertar en la selección del bien a producir, o del servicio a prestar, a fin de que el balance ex-post facto del prestatario muestre un superávit entre gastos e ingresos, para permitir saldar la deuda con el prestamista.
En síntesis, en el caso de la inversión, la tasa de retorno es el centro de la atención de la actividad económica real y financiera; y cuando ello no ocurre así, desviándose la corriente crediticia hacia las actividades especulativas y de consumo, como ocurrió entre finales del siglo XIX y principio del siglo XXI, aparecen las quiebras bancarias y las crisis políticas correspondientes. Conviene entonces, poner coto al surgimiento de tales eventos; centrando el éxito de la operación bancaria en la supervisión y control de los procesos que permitirán obtener superávit al prestatario...
El requisito señalado corresponde a lo que llamamos Banca de Tercera Generación[5]; opción para hacer frente a las crisis evocadas, al modificar las características administrativas heredadas de los procesos seguidos por la Banca de Segunda Generación durante el siglo XX: preocupados por limitar la expansión del crédito bancario, atendiendo a criterios discutibles. Asunto al que nos referiremos a continuación...
2.2 Incidencia del factor psicológico en la comprensión teórica
Durante la primera mitad del siglo XX, el Sistema Monetario Internacional de Bretton Woods, aceptó la necesidad de tener depósitos de moneda fiduciaria convertible, para controlar la oferta crediticia mediante un cálculo multiplicativo[6], al suponer que la causa de la inflación era la expansión de la oferta monetaria; mezclando, en un solo ítem, la liquidez para el intercambio en las operaciones al contado, y los requerimientos de financiamiento de la inversión reproductiva (crédito), que necesitan del transcurso del tiempo para llegar a su maduración.
Tal confusión es muy grave, al omitir el hecho de que la inversión reproductiva aumenta la oferta de bienes…Además de olvidar el razonamiento relacionado con la llamada Trampa de la liquidez; cuyo argumento central es el costo de oportunidad de conservar dinero, cuando existe la posibilidad de ganar réditos, adquiriendo bonos gubernamentales (títulos soberanos) o cualquier otro título (o deuda) ofrecido en las bolsas de valores[7].
Esto es, olvidar el factor especulativo, que afecta a la dinámica del crédito y de la tasa de interés…y que el beneficio de retener dinero por el servicio que presta en el intercambio corriente (Tobin, 1965) disminuye con el incremento de la inflación.
En términos simplísimos, el uso de la concepción del algoritmo multiplicativo en la banca de Segunda Generación, para limitar la expansión crediticia, tiene el vicio de aceptar como verdades, argumentos falaces[8] que llevan a las llamadas restricción y represión financieras, o limitación apriorística del crédito bancario.
Y, solo la consideración ulterior, a partir de la séptima década del siglo XX y del hecho de que los créditos concedidos aparecen como activos en los balances bancarios, con contrapartida formal en los depósitos, dio lugar a que las reservas operativas se calculasen como resultado de un algoritmo divisorio, que sustituyó al multiplicador antes usado[9]. El nuevo sistema se llamó lógicamente New View y la práctica precedente Old View.[10]
Así, la justificación macroeconómica requerida, para evitar el error y el dañino abuso gubernamental de usar el criterio de limitar a priori la creación de dinero bancario, vendrá de la mano de M. Allais (1981) y de las exigencias para realizar el diagnóstico clínico de las situaciones comprometedoras alejadas del comportamiento normal o deseable se obtuvo a partir de los aportes de J. P. Benassy (1984). Los aportes mencionados se resumen en la compensación de las transacciones reales y financieras; pues todo ingreso de alguien es gasto de otro.
Pudiendo distinguirse entre la incidencia del financiamiento por la vía del crédito y la consecuencia de usar la vía de los títulos nacionales y extranjeros (bolsas de valores) incluyendo la compraventa de divisas; ya que las actividades productivas y especulativas de cualquier país, presenta tres opciones de ganancia y riesgo: las tasas de interés bancario, el rendimiento bolsístico (reflejo de la eficiencia marginal productiva) y el diferencial cambiario.
Debiendo destacar que, en las economías pequeñas y abiertas, la especulación y la escalada de créditos pueden asociarse a la persistencia del déficit fiscal y que el mercado bolsístico juegue un papel menor, por la estrechez del aparato productivo; al tiempo que las variaciones del tipo de cambio provienen de la coyuntura del comercio exterior.
Mata Mollejas (1999)[11]. En términos contables, la parte sustantiva del pasivo del banco central se constituirá con las Reservas Internacionales (RIN) y con el equivalente en divisas de las reservas de la banca privada. “La operación rutinaria deberá centrarse en atender la variable instrumental crítica; que será la tasa de interés en los países con moneda aceptada internacionalmente, o cuando menos con mercado interior de mayor importancia que el externo; y la tasa de cambio será la variable crítica cuando las condiciones antes dichas no se cumplan” (Mata Mollejas, 2017, p. 41-42). Esto es, en las circunstancias habituales de las pequeñas economías, necesariamente abiertas al comercio exterior…y, en consecuencia, con bienestar dependiente de un saldo de balanza comercial con superávit…o, al menos que no induzca, sostenidamente, a la desvalorización de la moneda nacional.
Debiendo apuntar, finalmente, que las situaciones comprometedoras[12] evocadas provienen de los retardos en elaborar y aplicar normas administrativas adaptadas al marco de la New View, y que las crisis de finales del siglo XX y de comienzos del XXI, se asocian con las consecuencias de usar las falacias de la Old View, dando lugar a la insuficiencias de las medidas reactivas tomadas a trompicones; como las llamadas facilidades cuantitativas para sobrellevar la crisis 2008 – 2011 … habida cuenta de la persistencia subsecuente de la depresión.
3. Hacia un nuevo orden monetario bancario
Ante el comportamiento depresivo de la economía mundial, según vimos anteriormente, es comprensible que las grandes corporaciones industriales y financieras, recurran a la inversión especulativa; dada la posibilidad de la banca central de elevar las tasas de interés, amedrentada por las amenazas inflacionarias, cuando actúan sustentándose en el imaginario teórico del Old View; transformado en represión crediticia (Véase Boletín ANCE Nº 22) al no considerar, con atención detenida, la relación opuesta entre los movimientos de las tasas de interés y de los tipos de cambio; además de las disminuciones en el comercio internacional por tensiones y conflictos geopolíticos. Debiendo decir, en síntesis apretada, que la marcha coyuntural de las economías se puede evaluar observando las siguientes relaciones:
1º) La productividad, dependiente de la incorporación de las innovaciones tecnológicas, o dinámica de largo plazo;
2º) El suministro oportuno de capital de trabajo, con crédito a corto plazo o crédito comercial, relacionado con la dinámica del consumo nacional; y
3º) Los apoyos de la banca central a la banca privada. Principal fuente de la inversión reproductiva o de bienes y empleo.
En relación a tales indicadores, muy sintéticamente, se puede decir:
a) Que los valores bolsísticos estadounidenses (S&P, 500) se han cuadruplicado entre 2009 y 2018; lo cual es más del doble respecto a los valores europeos (Eurostoxx, 50) y a los valores de los países emergentes (MSCI) de acuerdo con J. O´Sullivan, en su artículo Convergence Theory (The Economist, The World in 2019), y
b) Que buscar diferenciales de intereses altos, conlleva, como corolario, procurar costos del capital de trabajo bajos; lo cual induce a crecimientos pausados de los consumos domésticos.
En cuanto a la relación productividad/rendimiento, los Estados Unidos, están un paso delante de Europa y dos delante de China, según R. Dalio, en Back to the Future (The Economist, The World in 2017);
De allí que, en los mercados de valores, solo es posible esperar cambios marginales en los stocks poseídos; al tiempo que, en los mercados bancarios, los créditos a corto plazos en los países industrializados, como los Estados Unidos, la Unión Europea, la Gran Bretaña y el Japón, están limitados por las alzas esperables en las tasas de interés, toda vez que las tasas reales son hoy negativas, ante el promedio inflacionario; mientras que en los países emergentes son altas; no siendo previsible su reducción, por la desvalorización de la deuda externa que ello implicaría[13].
Así, sólo nos queda resaltar que, con el final de las Facilidades Cuantitativas, y en general del dinero público barato, desembolsado para enfrentar la crisis 2008 - 2011, el crecimiento económico mundial para el resto del 2019 y para el 2020, será inferior al obtenido en 2018… y que la tendencia depresiva, plausivamente, se extenderá más allá del año 2021; abarcando a los países industrializados y a los emergentes.
En consecuencia, parece sensato concluir:
1ª) Que, es posible la ocurrencia de una nueva y profunda crisis… Por lo cual, sin dudas, el no estar atentos, a los síntomas evocados y a los argumentos presentados en los acápites precedentes, parece más que justificado procurar, en todas partes, la instrumentación urgente de la BANCA DE TERCERA GENERACIÓN: cuya gerencia vigila el uso del crédito, para garantizar el rendimiento proyectado de las inversiones reproductivas generadora de bienes (con consecuencias antinflacionaria) y de empleo (base real de la justicia distributiva) y
2ª) Que persistir en el ordenamiento financiero a la manera de la Banca de Segunda Generación, es incurrir en una conducta política a todas luces irracional.
BIBLIOGRAFIA REFERENCIAL MINIMA
Allais, M. (1981) Théorie General des Surplus. PUG. Grenoble.
Benassy, J.P. (1984) Théorie du déséquilibre et fondements microéconomiques de la macroéconomie. Revue Economique.
Bernacer. (1922) La Teoría de las Disponibilidades como interpretación de la Crisis. Revista nacional de Economía (España).
De Bernis, G y A. Cordova. (2000) La Situación actual de la Economía Mundial. Nueva Economía, Año, nº 15.
Friedman, M. (1963) Inflation, Causes and Consequences Edit. Asia Publishing House. Bombay.
Galbraith, J.K. (1991) Breve Historia de la Euforia Financiera. Edit. Ariel Barcelona.
Kindelberger (1991) Manías, Pánico y Crack edit. Ariel, Barcelona.
Keynes, J.M. (1936/75) Teoría General de la Ocupación, el interés y el Dinero, Edit. FCE, México.
Mata Mollejas, L. (2017) Tres tesis radicales, Edit. Fundación Alberto Adriani, Caracas.
------------- (1999) Essay on the Economic Synthesis and Financial Hegemony in The Current State of Economic Science (vol III) Spellbound Publications, Rohtak
Wicksell, K (1898/1962) Interest and Prices Edit. A. Kelley. New York
ANEXO ESTADÍSTICO
ANEXO 2
[1] El concepto crisis tiene variadas acepciones; y, en economía muchas veces se encuentra asociado a las Teorías de los Ciclos, que describen perturbaciones (expansiones- contracciones) por causas diversas. Las explicaciones dadas, relacionadas con la evolución de los sistemas productivos, han seleccionado, primero variables exógenas y luego endógenas. En todas ellas el tránsito de la fase de expansión a la de contracción representa el momento crítico. Entre las diversas teorías cabe recordar, entre las primeras, las de Juglar (1862) que destaca la variación de precios, y la de Kondratiev (1926) referida a la asociación innovación inversión y, entre las más recientes, las de Abraham-Frois (1995) y Dumenil (2000), que se diferencian de las primeras en el abandono de la hipótesis de regularidad temporal y en hacer énfasis en variables endógenas relativas a la actividad financiera.
[2] Al respecto, hay que apuntar que el mundo petrolero y minero en general, dado que las cotizaciones se hacen en los mercados financieros, hay amenazas de alzas de precios, lo cual es inconveniente para importadores y exportadores, al reducirse los volúmenes transados.
[3] Descritas entre otros por Galbraith (1991)
[4] Datos de los resultados de la acción colectiva, en donde no es una circunstancia banal el hecho de que el dinero y los precios relativos permitan cuantificar los deseos por determinados bienes.
[5] Mata Mollejas, L. y K. Asker Hasam (2018)
[6] Este criterio impone que la oferta deba poder ampliarse según el ritmo de la demanda: si ello no es así, los precios subirían. Por esa circunstancia el sistema monetario basado sobre el oro debió cambiarse; y es absolutamente estúpido pensar que el mundo actual pueda retornar a él o apoyarse en otro recurso físico natural… de limitada existencia en el planeta.
[7] Keynes (1936/1951, pp. 167-168)
[8] Falacia de composición.
[9] Advirtamos aquí que las normas de establecer reservas obedecen al enfoque Old View, bajo la idea de brindar protección a quien ahorra; siendo el supuesto implícito el que tales depósitos son esenciales (no marginales) y que la operación bancaria es de intermediación para facilitar la inversión real mediante el crédito: operaciones que darían fragilidad intrínseca al sistema bancario. Hipótesis que parecen propias del siglo XIX.
[10] Siendo importante recordar que, en 1973, aparecieron trabajos críticos como los de R. McKinnon y E. Shaw, en donde se sostuvo que la apriorística restricción financiera se estaba transformando en intencional represión financiera en las economías pequeñas y abiertas, con el propósito gubernamental de aumentar el flujo de recursos de la economía privada a la gubernamental, sin acudir al aumento abierto de la imposición fiscal.
[11] De allí que las autoridades fiscales deban ser parsimoniosas en la contratación de créditos externos y la banca central deba suministrar oportunamente la ayuda al mercado crediticio; distingüendo el crédito en divisas para fomento de las exportaciones y dejar flotar el tipo de cambio para evitar caer en los excesos de la especulación cambiaria.
[12] Circunstancias asociadas a la miopía política monetaria orientada a perseguir una ilusoria estabilidad en la relación entre el poder adquisitivo interno y la estabilidad de los tipos de cambios (estabilidad externa) a pesar de las alertas de imposibilidad real realizada por Mundell.
[13] En el caso de China se afecta negativamente al balance de su Banco Central
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